domingo, 7 de septiembre de 2008

¿Dónde está el Estado del Bienestar?

Se dice que existe un Estado del Bienestar o Estado Providencia cuando el Estado asegura la protección social, entendida ésta mediante derechos tales como la sanidad, la vivienda, la educación, los servicios sociales, las pensiones de jubilación o la protección del empleo o del empleado.

Cuando un tercio de la población está por debajo del umbral de la pobreza y la protección social de las personas no está garantizada, no se cumplen las leyes y los artículos de la Carta Magna quedan en papel mojado un día tras otro, podemos decir que el Bienestar Social y la misma Democracia no están garantizados.

Hablamos de "crisis", esa palabra que tanto miedo da a nuestros gobernantes, para referirnos al ralentizamiento en los incrementos de riqueza de los tres elementos de nuestra sociedad por los que vela el Estado, banqueros, constructores y políticos.

Cuando las medidas para salir de la crisis pasan por compensar a los constructores y garantizarles unas "rentas máximas", con el dinero que debería garantizar unas rentas mínimas para el tercio pobre del país, básicas para subsistir en caso de que no exista un "salario mínimo" al que agarrarse.

Siendo el país de Europa que más coches y casas tiene por habitante, no es posible que una tercera parte no tenga tan siquiera puentes, albergues o residencias donde meterse en días de lluvia. Las viviendas que antes eran para quienes no podían pagarlas ahora son viviendas de protección y en situaciones ventajosas para quien demuestre tener una o dos nóminas, lo que significa que nuestros gobernantes le cuidan el huerto a los constructores y banqueros o mucho más grave, nuestros mantenidos al cuidado de la saca de todos son banqueros en si mismos, de ahí que no nos garanticen la vivienda, el empleo, la sanidad y mucho menos la educación imparcial que facilite a los hombres y mujeres del mañana el conocimiento sobre "el sistema" que nos acoge. Nuestros gestores y sus amigos parece que han mamado dinero negro y beben petróleo, ¿a quien le extraña por tanto que defequen argamasa, o en español de España, que caguen cemento?

Insaciables máquinas de destrucción y responsables también de la concentración mediática. Los que hace años denominábamos medios de comunicación "social" se han quedado en lo de "medios" de mediocre y al servicio de los magnates del ladrillo, sus dueños, mantenidos y utilizados por las administraciones para fines siempre "políticos" al ser este negocio "deficitario", sin información veraz que comunicar y sin clientela interesada en consumir su bazofia de pago, cuando es posible llegar a la verdad gracias a Internet y los medios sociales, el Tercer Sector de la Comunicación que en 1980 la ONU instó a sus miembros que reconocieran y apoyaran, pero que también en este caso España miró para otro lado. El cuello de botella que estrangula las libertades y el cumplimiento de la igualdad social se llama "Estado de las Autonomías" y es evidente que no corresponde a los principios descritos en la Constitución Española.

Pero cuando creíamos que lo habíamos visto todo un artículo titulado "Recurrir a El Pocero" nos demuestra donde acuden los ciudadanos ante la desesperación de tener que sobrevivir a la Sociedad del Bienestar, en lugar de a las Consejerías correspondientes en cada comunidad autónoma, dedicadas a mantener organizaciones y justificar partidas, rechazando proyectos, peticiones y demandas de ayuda. Ellos dicen que "no están para eso", aunque a nosotros nos gustaría conocer el significado de su existencia y el destino de los dineros presupuestados para Bienestar Social en esta "Dictadura Constitucional" y Estado de la Desvergüenza llamado España.